Cuando uno piensa en el departamento de Calvados, le viene a la mente una sucesión de imágenes hermosas: sus majestuosos paisajes naturales entre la tierra y el mar, su deliciosa gastronomía, sus lugares históricos y, por supuesto, las preciosas playas bañadas por el Canal de la Mancha. El Calvados es todo esto… ¡y mucho más! Deje que le ayudemos a (re)descubrir este territorio normando de mil y una caras. ¡Vamos allá!
Caen
Comenzaremos el (re)descubrimiento de los tesoros del Calvados en Normandía visitando la capital del departamento, Caen. La ciudad natal de Guillermo el Conquistador atesora un patrimonio histórico de gran riqueza, como la Abadía de los Hombres y la Abadía de las Mujeres. Apueste por una visita guiada para conocer todos los motivos, particulares cuando menos, de su edificación. Curiosidades aparte, se trata sin duda de construcciones de gran belleza arquitectónica.
Otros lugares imprescindibles de la ciudad son su castillo, antigua fortaleza medieval que alberga hoy el “complejo de los museos”, y el Memorial dedicado a la Segunda Guerra Mundial. Y, por supuesto, no se vaya de Caen sin antes recorrer su centro y su casco antiguo, donde abundan las tiendas y cafés con encanto.
Honfleur
La localidad de Honfleur es, en sí misma, una invitación al paseo y la desconexión. Deje que sus piernas le guíen hacia el puerto, sin duda uno de los más coquetos de Francia, que recuerda a Copenhague, y al Museo Eugène Boudin, hijo predilecto, pasando por la iglesia de Sainte-Catherine, construida fundamentalmente en madera (algo muy poco habitual en Francia), sin olvidar los muchos mercados de la ciudad (mercado de pescado, de productos ecológicos, de las flores o nocturno).
Saint-Aubin-sur-Mer
Saint-Aubin-sur-Mer, pintoresca estación balnearia al borde del mar, ofrece un soplo de aire fresco (y iodado) a los veraneantes que vengan a cargar aquí las pilas y… ¡mucho más! Se trata de un excelente punto de partida para explorar este rincón del paraíso en Normandía además de un terreno de juego fabuloso para practicar actividades náuticas como el kitesurf, el carro a vela, el windsurf o el marisqueo… No pierda de ocasión de deleitarse con una mariscada a base de manjares recién salidos del mar.
Bayeux
Resulta imposible visitar esta ciudad de Calvados y no quedar prendado de su célebre e impresionante tapiz. Con una dimensión de casi 70 metros (¡ahí es nada!), relata la conquista de Inglaterra por parte de Guillermo el Conquistador (sí, de nuevo él). Centenares de personajes, animales y otras ilustraciones han sido bordadas sobre el tapiz y su estupendo estado de conservación le ha valido el reconocimiento de la UNESCO. ¡Aproveche para admirarlo de cerca con su tribu!
Ahora bien, Bayeux es también una antigua ciudad medieval que logró sortear los bombardeos y permanece prácticamente igual que en el siglo XVIII. Como resultado, los visitantes podrán admirar sus casonas de piedra y suntuosos palacetes, ¡que confieren a la localidad un encanto arrebatador!
Deauville
Chic y elegante, Deauville es LA estación balnearia de renombre del Calvados. Sus cabinas de playas, villas burguesas, palacios, casinos y su festival de cine estadounidense, sin olvidar sus famosas Planches, le harán caer rendido ante la magia de esta perla normanda à la française.
Cabourg
Destino predilecto de Marcel Proust, que lo elegía como lugar de veraneo año tras año, Cabourg es una localidad costera normanda que destaca por su encanto de antaño, con sus palacetes de la Belle Epoque y su Grand Hôtel, antiguo lugar de veraneo de la alta burguesía parisina. Su preciosa arquitectura y su atmósfera de tiempos pasados, su maravillosa playa “de los románticos” y su paseo peatonal (el más largo de Europa) lo convierten en el destino ideal para las familias y los enamorados que deseen escapar del bullicio de la ciudad. ¡Por algo es conocido como “la Reina de la Côte Fleurie”!
Omaha Beach y las playas del Desembarco
Omaha Beach, lugar histórico de referencia, es una de las playas del Desembarco donde llegaron los aliados el 6 de junio de 1944. Recorrer esta playa, que fue el escenario del acontecimiento más importante de la historia moderna, es tan conmovedor como necesario para el deber de la memoria. Y la visita al cementerio americano, donde yacen los cuerpos de 9.000 soldados caídos en combate, situado justo encima, le pondrá también la piel de gallina.
La Suiza normanda
¿Paisajes suizos en Normandía? Los relieves abruptos que contrastan con el resto de la región (y que recuerdan a Suiza) han dado su nombre a este paraíso de los deportes al aire libre. Los deportistas podrán practicar aquí ala delta, parapente, escalada, senderismo o canoa-kayak. En el Calvados, el deporte y la adrenalina no se cogen vacaciones.
La ruta de la sidra
Imposible hablar del Calvados sin mencionar su deliciosa gastronomía … ¡y su sidra! Esta bebida espumosa a base de manzana es el orgullo de la región, tanto que hay una ruta en su honor. A lo largo de este itinerario turístico señalizado de 40 km recorrerá el maravilloso pays d’Auge y sus pintorescos pueblos y podrá conocer a los productores de este delicioso néctar. ¡Consúmalo con moderación, eso sí, o al menos inténtelo!
La Côte de Nacre
Este tramo del litoral normando, que se extiende desde Courseulles-sur-Mer hasta Ouistreham pasando por Luc-sur-Mer y Saint-Aubin-sur-Mer, debe su nombre a los reflejos nacarados de las conchas que tapizan sus playas. Precioso, ¿no le parece? Encontrará aquí todos los atractivos del litoral de la costa atlántica, véanse coquetas estaciones balnearias familiares, el siempre revitalizante aire marino y un estilo de vida irresistible. Aproveche su estancia en el Calvados para conocer esta costa, ¡no se arrepentirá!
¿Con qué alojamientos cuenta en el Calvados?
En nuestros campings de 4 y 5 estrellas, todos los veraneantes (familias XXL, parejas, grupos de amigos, primos) encontrarán un nidito acogedor a su medida:
- Mobile-homes totalmente equipadas para acoger a grupos de hasta 10 personas
- Parcelas de campings para hacer una inmersión en plena naturaleza
Un litoral espectacular, pintorescos pueblos de gran encanto, una suculenta gastronomía, un patrimonio histórico de gran riqueza: lo ha entendido usted bien, el Calvados tiene todo lo que hay que tener para conquistar a visitantes venidos de todos los horizontes. Quién sabe, ¡igual acaba enamorándose de este precioso departamento de Normandía!
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