Con su castillo medieval de renombre, sus casitas adosadas las unas a las otras a los pies de los acantilados y sus jardines suspendidos, todo ello en la preciosa paleta de azules y verdes que brinda su extraordinaria naturaleza, Vogüé parece sacado de un mundo mágico. En eso consiste la magia de los pueblos de Ardèche: ofrecen un paréntesis propio de otros tiempos que deja huella en los visitantes. ¡Llegó su turno de dejarse embelesar por su innegable encanto!
Para visitar esta magnífica región y sus preciosos pueblos, como Balazuc, otro pueblo que figura entre “los pueblos más bonitos de Francia”, ¡apueste por nuestro camping Sandaya! Su primera baza: sin duda su ubicación geográfica, en el corazón de 14 hectáreas de verdor. Segunda baza: sus infraestructuras y servicios pensados para ofrecerle una estancia insuperable. Con sus dos espacios acuáticos climatizados, spa, clubes infantiles gratuitos y amplia oferta de actividades in situ o en los alrededores, pone su felicidad por encima de todo. La guinda del pastel: ¡el acceso directo al río para chapotear, pescar o entregarse a la práctica de la canoa!