Para sus próximas vacaciones de verano, diríjase a Barjac, bonito pueblo situado en la frontera entre los departamentos de Ardèche y el Gard. Se sentirá arrullado por el suave canto de las cigarras, maravillado por la vegetación mediterránea, entusiasmado por la diversidad de actividades y seducido por los productos locales. ¡Un estupendo plan para sus vacaciones en camping!
Al elegir este entorno renacentista como destino de sus vacaciones, se asegura una estancia marcada por la autenticidad, el cambio de aires y el dejarse llevar. Y lo mejor de todo, es que algunos de los más bellos parajes naturales de Ardèche, como las gargantas del Ardèche, el Pont d'Arc y la cueva de Chauvet 2 están muy cerca. En familia, con amigos o en pareja, las vacaciones ideales en Ardèche empiezan en Barjac.
En el corazón de un entorno verde, su camping Sandaya será el marco perfecto para sus aventuras en Ardèche. In situ, podrá disfrutar de espacios acuáticos climatizados, uno de ellos cubierto, un spa de ambiente envolvente, clubes infantiles gratuitos y acceso al río. Y en el exterior del camping, la oferta tampoco desmerece: piragüismo en el río, senderismo, arborismo, visitas al patrimonio y experiencias gastronómicas ¿Qué más se puede pedir?
Entre niños y animales existe una genuina historia de amor, y una visita al Parque de animales de las gargantas del Ardèche parece una forma perfecta de complacer a los pequeños campistas. En una extensión de más de 10 hectáreas, irán al encuentro de los divertidos animales del parque, algunos de los cuales proceden de razas extrañas y en peligro de extinción. Sus hijos podrán incluso tocarlos en los "corrales de caricias" repartidos por el parque. ¡Una actividad familiar aprobada por todos!
Incluya en su programa de vacaciones una visita a la cueva de Chauvet 2, una de las principales atracciones turísticas, aunque sólo sea por ver sus pinturas rupestres demás de 30.000 años de antigüedad. Declarado patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el excepcional sitio cultural sumergirá a grandes y pequeños en la era prehistórica y le convertirá en especialista de la historia de los primeros seres humanos. ¡Seguro que sus hijos contarán esa experiencia única a sus amigos del cole!
Amantes de la aventura, pónganse los chalecos salvavidas y los remos porque la actividad ineludible de las gargantas del Ardèche en la que todos coinciden es, desde luego, el piragüismo. Bajar el río y dejarse encantar por la impresionante belleza de la naturaleza es una experiencia que solo se vive en Ardèche. Y si además la comparte con su pareja, ¡casi no se puede imaginar una escapada romántica más perfecta!
De vuelta a tierra firme, en los meses de verano, vaya a admirar los campos de lavanda. Le sorprenderá el azul de los campos infinitos y le embriagará el perfume característico de la emblemática planta provenzal que se palpa en el aire. ¿Acaso existe mejor escenario mejor para un selfie en pareja? Y lo mejor es que puede llevarse a casa un aromático recuerdo.
Subir a los árboles para jugar a Jane y Tarzán y experimentar las primeras emociones aventureras: ¡eso es lo que espera a su tropa durante una excursión de arborismo!
En la cueva de Saint-Marcel le espera una actividad insólita: la espeleología. Tras recorrer los pasillos de la cueva, podrá degustar los vinos de Ardèche en plena oscuridad.
Para recuperarse de sus azañas deportivas, no deje de probar la gastronomía de Ardèche. Le encantarán los deliciosos productos locales, tanto dulces como salados, y harán vibrar de excitación a sus papilas gustativas.
Otro lugar imprescindible de Ardèche es el Gran Sitio del Aven d'Orgnac, donde descubrirá un mundo mágico de estalactitas y estalagmitas a 120 metros de profundidad. ¡Hechizo garantizado!
