Camping Cueva de Rouffignac

En la cueva de Rouffignac, a la que llaman la “cueva de los 100 mamuts”, se pueden admirar más de 250 dibujos, de los que 158 representan esos imponentes animales prehistóricos. Una curiosa característica que la convierte en una de las cuevas más decoradas de Europa. Aunque menos conocida que Lascaux, la cueva de Rouffignac es mucho más antigua y también mucho más grande, con 8 km de túneles. Tanto si se aloja cerca de Sarlat, en el Périgord Noir, como de Périgueux, en el Périgord Vert, en pocos minutos llegará a Rouffignac desde su camping Sandaya.

Sus vacaciones en Dordoña le llevarán tras las huellas de los primeros seres humanos, y además podrá disfrutar de un entorno excepcional, entre ríos, bosques y fortalezas medievales. Situado en el corazón de esos magníficos paisajes, su camping Sandaya le ofrece alojamientos de vacaciones totalmente equipados y parcelas de camping en plena naturaleza. Asimismo, organiza numerosas actividades durante toda la temporada para mantener ocupados a grandes y pequeños, sin olvidar el gran parque acuático con delirantes toboganes y piscinas climatizadas. ¡Encuentre el equilibrio perfecto entre descanso y actividad!

Los niños no podrán resistirse a tan apasionante aventura: diríjase a la cueva de Rouffignac para desentrañar los misterios de los primeros seres humanos. Desde su camping Sandaya, diríjase a la localidad de Rouffignac-Saint-Cernin-de-Reilhac, situada en las colinas más altas del Périgord Noir. ¡La exploración va a empezar!

En familia, móntese en el Expreso de Rouffignac, el tren eléctrico que le guiará, a la luz de su linterna, por las excavaciones de la cueva. Abra bien los ojos para ver los cientos de mamuts, bisontes y rinocerontes dibujados por artistas prehistóricos. También se enterará de que la cueva fue primero el hogar de los osos de las cavernas... No le contamos más, ¡siga próximo capítulo en Rouffignac!

Pasar unas vacaciones en la Dordoña en pareja significa disfrutar de sus inmensos paisajes inmaculados entre ríos y bosques. Tras la visita subterránea de la cueva de Rouffignac, vuelva a la superficie para explorar sus alrededores antes de regresar al camping. ¡Síganos!

Rodeada por el bosque Barade, Rouffignac-Saint-Cernin-de-Reilhac es ideal para aficionados a senderos de corto recorrido. Podrá elegir entre nada menos que 5 bucles, entre ellos el del Herm para descubrir su castillo medieval. Además, por la posición prominente del pueblo, podrá disfrutar de hermosas vistas panorámicas del frondoso Périgord Noir.